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Los lineamientos de gestión de personas en el Estado chileno hasta el año 2016 han adoptado diversas estrategias que han asumido el rol de asesoría de diversas formas y roles, pasando por distintas etapas. Sin embargo, nada de lo anterior garantizaba el rol rector y normativo que supuestamente aseguraría la instalación de políticas alineadas y transversales a todos los servicios públicos. Basado en lo detallado, la Presidenta Michelle Bachelet el 2 de octubre de 2016 promulgó una nueva ley que rige al Servicio Civil chileno. En ella, se pretende perfeccionar el Sistema de Alta Dirección Pública, pero lo más relevante, consagra el rol de rectoría en materia de Gestión de Personas, dotando al Servicio Civil chileno de la facultad de aplicar normas de carácter general en estas materias, y con ello, consolidar el rol rector, definiendo y reportando los incumplimientos a la Contraloría General de la República.

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